El galeno informó que cada mes se utilizan entre 1,5 y dos millones de pesos para atender a pacientes que llegan sin seguro médico de otros centros asistenciales, que los remiten al Incart cuando se les acaba la cobertura.
“Estamos atendiendo alrededor de un 20 por ciento de pacientes sin seguro, y eso nos ocasiona problemas presupuestales, ya que los demás centros los refieren aquí cuando ya se les ha agotado la cobertura”, dijo Báez.
Agregó que ese instituto tiene que cubrir muchos gastos, y puso como ejemplo que el Incart necesita un tubo para realizar tomografías, cuyo costo asciende a cinco millones de pesos. Añadió que el 40% del presupuesto de ese organismo se utiliza en la nómina de la institución. El profesional de la medicina también se refirió a la incidencia del cáncer en el país, ya que, según dijo, el Incart recibe más de dos mil casos al año.
Afirmó que ofrecer cifras de mortalidad por cáncer no es tan fácil, debido a que antes no se contabilizaban los casos que eran detectados de manera eficiente.
“No es una labor tan fácil, debido a que ahora es cuando se están registrando los casos, porque antes no se hacía y por ello ese aspecto se dificulta”, dijo.
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